Riesgos del cáncer de cuello de útero
Varios factores de riesgo aumentan sus probabilidades de padecer cáncer de cuello uterino. Las mujeres sin estos factores de riesgo raramente padecen dicha enfermedad. Aunque estos factores aumentan las probabilidades de padecer cáncer de cuello uterino, muchas mujeres con estos factores de riesgo no padecen esta enfermedad.
Al considerar estos factores de riesgo, es útil enfocarse en los que se pueden cambiar o evitar (tales como fumar o una infección con el virus del papiloma humano), en vez de enfocarse en los que no se pueden cambiar (tales como su edad y antecedentes familiares). Sin embargo, sigue siendo vital conocer los factores de riesgo que no se pueden cambiar ya que resulta aún más importante para las mujeres que tienen estos factores hacerse la prueba de Papanicolaou para detectar el cáncer de cuello uterino en las primeras etapas. El principal factor de riesgo del cáncer de cuello uterino es la infección por el virus del papiloma humano, si a éste se le añaden otros, aumenta la probabilidad de que se desarrolle el cáncer de cuello de útero.
Infección por el virus del papiloma humano
El factor de riesgo más importante para el cáncer de cuello uterino es la infección con el virus del papiloma humano (VPH o HPV, por sus siglas en inglés). El VPH es un grupo de más de 150 virus relacionados, algunos de los cuales causan un tipo de crecimiento llamado papilomas, lo que se conoce más comúnmente como verrugas.
Ciertos tipos de VPH pueden causar verrugas que pueden aparecer en o alrededor de los órganos genitales y en el área del ano. Estas verrugas pueden ser apenas visibles o pueden tener varias pulgadas de diámetro. Se conocen como verrugas genitales o condiloma acuminado. Los dos tipos de HPV (papilomavirus humano) que causan la mayoría de los casos de verrugas genitales son el VPH 6 y el VPH 11. A estos tipos se les llama HPV (papilomavirus humano) de bajo riesgo porque rara vez están asociados al cáncer del cuello uterino.
Los médicos creen que una mujer tiene que estar infectada con HPV (papilomavirus humano) antes de desarrollar cáncer de cuello uterino. Aunque esto puede resultar de una infección con cualquier tipo de alto riesgo, alrededor de dos tercios de todos los cánceres de cuello uterino son causados por HPV (papilomavirus humano) 16 y 18.
La infección por VPH es común, y en la mayoría de las personas el organismo es capaz de eliminarla por sí mismo. Algunas veces, sin embargo, la infección no desaparece y se torna crónica. Una infección crónica, especialmente cuando es causada por los tipos de HPV (papilomavirus humano) de alto riesgo, puede eventualmente causar ciertos cánceres, como el cáncer de cuello uterino.
La única manera de prevenir verdaderamente que estas áreas se infecten con VPH podría ser evitar completamente el contacto de esas áreas de su cuerpo que se pueden infectar con el VPH (como la boca, el ano, y los genitales) con aquellas de otra persona.
La prueba de Papanicolaou detecta cambios en las células cervicales causados por la infección con VPH. Otras pruebas detectan infecciones mediante la búsqueda de genes (ADN) del HPV (papilomavirus humano) en las células. Para algunas mujeres, la prueba de HPV (papilomavirus humano) se usa junto con la prueba de Papanicolaou como parte de la detección.
Aunque los científicos creen que es necesario haber tenido HPV (papilomavirus humano) para que se origine el cáncer de cuello uterino, la mayoría de las mujeres con este virus no desarrollan cáncer. Los doctores creen que otros factores tienen que surgir para que se origine el cáncer. Algunos de ellos son:
1- Tabaquismo
2- Inmunosupresión
El virus de inmunodeficiencia humana (VIH o HIV, en inglés), el virus que causa el SIDA (AIDS), ocasiona daño al sistema inmunológico y provoca que las mujeres estén en un mayor riesgo de infección con HPV (papilomavirus humano). Esto podría, en parte, explicar el riesgo aumentado de cáncer de cuello uterino en las mujeres con AIDS. También que el sistema inmunológico podría ser importante para destruir las células cancerosas, así como para retardar su crecimiento y extensión
3- Infección con Clamidia
La clamidia es una clase relativamente común de bacteria que puede infectar el sistema reproductor. Se transmite mediante el contacto sexual. La infección con clamidia puede causar inflamación de la pelvis que puede conducir a la infertilidad
4- Alimentación con pocas frutas y verduras
5- Tener sobrepeso
6- Uso prologando de anticonceptivos orales (píldoras para el control de la natalidad)
Existe evidencia de que el uso de píldoras anticonceptivas por períodos prolongados aumenta el riesgo de cáncer de cuello uterino. La investigación sugiere que el riesgo de cáncer de cuello uterino aumenta mientras más tiempo una mujer tome las píldoras, pero el riesgo se reduce nuevamente después de suspender las píldoras.
7- Uso de un dispositivo intrauterino
Un estudio encontró que las mujeres que en algún momento han usado un dispositivo intrauterino tenían un menor riesgo de cáncer de cuello uterino. El efecto en el riesgo se observó incluso en mujeres que tuvieron un dispositivo intrauterino por menos de un año, y el efecto protector permaneció después que los dispositivos fueron removidos.
8- Tener muchos embarazos a término
Las mujeres que han tenido tres o más embarazos a término (completos) tienen un riesgo aumentado de padecer cáncer de cuello uterino. Nadie sabe realmente la razón de esto. Una teoría consiste en que estas mujeres pudieron haber tenido relaciones sexuales (coito) sin protección para quedar embarazadas, por lo que pudieron haber estado más expuestas al VPH.
9- Tener menos de 17 años en el primer embarazo a término
10- Pobreza
Muchas mujeres con bajos ingresos no tienen acceso fácil a servicios adecuados de atención a la salud, incluyendo las pruebas de Papanicolaou. Esto significa que es posible que no se hagan las pruebas de detección ni reciban tratamiento para precánceres y cánceres de cuello uterino.
10- Dietilestilbestrol (DES)
El dietilestilbestrol (DES) es un medicamento hormonal que se administraba a algunas mujeres para prevenir el aborto espontáneo entre 1940 y 1971. A las mujeres cuyas madres tomaron dietilestilbestrol cuando estaban embarazadas se les llama hijas del dietilestilbestrol. Estas mujeres padecen adenocarcinoma de células claras de la vagina o del cuello uterino con más frecuencia de lo que normalmente se esperaría. Este tipo de cáncer se presenta en muy pocas ocasiones en mujeres que no sean hijas del dietilestilbestrol. Existe alrededor de un caso de este tipo de cáncer en cada 1,000 mujeres cuyas madres tomaron dietilestilbestrol durante el embarazo. Esto significa que aproximadamente 99.9% de las hijas del dietilestilbestrol no padecen estos cánceres.
Las hijas del dietilestilbestrol también pudieran tener un riesgo aumentado de cánceres de células escamosas y precánceres de cuello uterino asociados con el HPV (papilomavirus humano).
Aunque las hijas del dietilestilbestrol tienen un mayor riesgo de carcinomas de células claras, las mujeres no tienen que haber estado expuestas a dietilestilbestrol para padecer carcinoma de células claras. A pesar de presentarse en muy pocas ocasiones, antes de crear el dietilestilbestrol, las mujeres eran diagnosticadas con la enfermedad.
11- Antecedente familiar de cáncer de cuello uterino
El cáncer de cuello uterino puede presentarse con mayor frecuencia en algunas familias. Si la madre o hermana de una mujer tuvieron cáncer de cuello uterino, sus probabilidades de padecer esta enfermedad aumentan de dos a tres veces en comparación a si nadie en la familia lo hubiera padecido
Signos y síntomas del cáncer de cuello uterino
Los síntomas a menudo no comienzan hasta que un precáncer se torna en un cáncer invasivo verdadero y crece hacia el tejido adyacente. Cuando esto ocurre, los síntomas más comunes son:
– Sangrado vaginal anormal, tal como sangrado después de sostener relaciones sexuales (coito vaginal), sangrado después de la menopausia, sangrado y manchado entre periodos y periodos menstruales que duran más tiempo o con sangrado más profuso de lo usual. El sangrado después de una ducha vaginal o después del examen pélvico es un síntoma común del cáncer de cuello uterino, pero no de precáncer.
– Una secreción vaginal inusual (la secreción puede contener algo de sangre y se puede presentar entre sus periodos o después de la menopausia).
– Dolor durante las relaciones sexuales (coito vaginal).
diccionario https://www.cancer.gov/espanol/publicaciones/diccionario?CdrID=764583
https://prezi.com/ksgjpti2vvk0/clasificacion-de-papanicolaou/