Inicio > Psiquiatría > Actualización sobre el diagnóstico y tratamiento de la esquizofrenia y otras psicosis > Página 24

Actualización sobre el diagnóstico y tratamiento de la esquizofrenia y otras psicosis

paciente esa representación, no si es verídica o no.

Otro ejemplo, es el de un paciente con delirio de perjuicio en el trabajo, el paciente va organizando poco a poco un tópico delirante sobre el supuesto perjuicio a que está siendo sujeto por sus compañeros, de tal forma que es creíble por sus familiares, los cuales tienden a apoyar al paciente. Ésta es una peculiaridad trascendente del delirio crónico. Sin embargo a diferencia de lo anterior en el delirio esquizofrénico, su incoherencia, su ininteligibilidad, su embrollo, poca objetividad, ambiguo, utópico hace imposible que sea fustigado a un conocido.

En sinopsis el paciente delirante o paranoico tiene un aspecto sano, su forma de actuar es propio, descontado el proceder circunstancial a sus delirios. El paciente vive para su delirio y le ocupa gran parte de su tiempo, aunque no hay deterioro de la personalidad, tampoco suelen aparecer trastornos de la memoria, el raciocinio, de la esfera cognitiva y la capacidad de juicio ni aparecen los signos negativos que describimos en la esquizofrenia.

En los pacientes con paranoia esta germina habitualmente sobre personas vanidosas, engreídas, que pueden llegar a ser petulantes, inmodestas, con una autoestima y criterio hipervalorada de su persona, piensan en su mente que los demás les tienen envidia, celos, odio, antipatía o rencor.

Solamente sus opiniones son las que valen, no admiten ni consideran que otros también son capaces de hacer las cosas y pueden tener razón en sus planteamientos, son egocéntricos, les gusta llamar la atención, que el mundo gire alrededor de ellos, piensan que nunca se equivocan, sus fracasos se lo imputan a infamias de otros. Tienen gran necesidad de tener triunfos, reconocimientos, consideraciones por otros.

Son presumidos, recelosos, desconfiados, están constantemente prestos, en guardia, piensan y temen de la posibilidad de un maléfico plan de los demás para hacerle daño. Nunca se encuentran a gusto con las cosas, logros, con nadie, tienen a estar siempre insatisfechos, quejumbrosos, que pueden llegar a ser insoportables y hacerle la vida insoportable al que está a su lado, incluso al ser amado, se vuelven intolerantes, como dicen en cuba mi país de origen , le hacen la vida un yogurt a los que lo rodean, son tan perfeccionistas que para ellos no hay nadie bueno, o que haga las cosas también como ellos, piensan que los otros no son capaces, el único capaz es el enfermo.

Los delirios pueden ser muy variados, y entre lo más habituales se hallan los delirios de persecución o referencia, de grandeza, eróticos, de injusticia, entre otros, a continuación se describen los más frecuentes (46, 48, 52).

Temática delirante.

De persecución, perjuicio o referencia

Es el trastorno más frecuente; en el de persecución el paciente se siente perseguido por personas, sectas, organizaciones, gobiernos, etc. El de perjuicio es similar, el paciente se siente perjudicado por acciones de otros, compañeros, vecinos, etc. En el de referencia, se siente espiado, observado, murmurado por otros.

De celos

El paciente, generalmente hombre, se siente traicionado o engañado por su esposa. Es absolutamente irrebatible a la argumentación, no acepta ni una posibilidad de que no sea así y lo argumenta en una serie de hechos banales, poco consistentes. Es muy frecuente que se trate de individuos alcohólicos y puede llegar a ser peligroso para el sujeto objeto del delirio.

Erotomaníaco

El paciente, generalmente mujer, cree haber enamorado a otro, generalmente de rango superior y con quien puede que ni siquiera haya hablado nunca. También conocido como síndrome de Clerambault.

De grandeza

Convicción de enorme importancia, de creerse poseedor de fortunas o responsable de importantes inventos. Hay que hacer el diagnóstico diferencial con los cuadros afectivos de tipo maníaco, en los que estos delirios son muy frecuentes.

Somático

Creen tener alguna deformidad o enfermedad física. Es frecuente la creencia de desprender algún olor desagradable, que el paciente no es capaz de oler, pero que los demás sí lo hacen y lo sabe por comentarios o gestos de éstos. El delirio hipocondríaco consiste en la creencia de tener alguna enfermedad física, generalmente un tumor cerebral o algún otro cáncer. El enfermo se basa en sensaciones o dolores inespecíficos (cefaleas tensionales) y a diferencia de la neurosis hipocondríaca se muestra convencido de forma irrebatible de la existencia de la enfermedad. En la dismorfofobia delirante, el individuo considera que posee alguna deformidad, lo que le lleva a realizarse numerosas intervenciones quirúrgicas que siempre serán insatisfactorias y con frecuencia denuncia al cirujano como responsable de otra deformidad también delirante.

Dermatozoico

El paciente tiene la sensación de estar infectado por pequeños insectos que le generan una sensación de picor. Suele acompañarse de lesiones de rascado. Recibe el nombre de síndrome de Ekbow. Frecuentemente se observa en consumidores crónicos de cocaína.

Parafrenia

El término parafrenia, para ser entendido y expresado con mis propias palabras, se refiere a otro tipo de psicosis diferente a la esquizofrenia en la cual el paciente ideas delirantes bien elaboradas, propias de la imaginación del paciente, fantásticas, ficticias, ilusorias, imaginativas, pero congruentes, que el paciente las describe con tal facilidad y congruencia que parecen reales y por supuesto el paciente piensa que son totalmente reales, esta realidad fantástica se encuentra superpuesta con la realidad objetiva sin que el paciente pierda contacto con el medio ambiente, algo importante en estos pacientes es que no tienen deterioro de la personalidad ni deterioro de sus capacidades intelectuales ni de la esfera afectiva ni de la voluntad. Los delirios suelen ser de un sinnúmero variable de contenido como son los delirios de influencia, dominio, de seguimientos, detrimento, prometeicos, descubrimientos, milagros, megalomaníacos, misticismos, lubricidad.

Menciono un paciente que tuve hace algunos años el cual era ingeniero agrónomo y veterinario que dirigía una empresa agropecuaria en la provincia de Santiago de Cuba, de piel morena de 46 años de edad, era muy reconocido por sus inventos fantásticos, por ejemplo había desarrollado e inventado un juego de mesa el ajediez, que era similar al ajedrez pero en vez de tener rey, reina, torres, caballos, alfiles y peones, las figuras eran los elementos propios de un central azucarero, alzadoras,