gran utilidad en el estudio de la incorporación de la virtualidad en el campo de la educación superior.Olmedo y Peinado (2007), se plantearon un estudio cuyo objetivo fue determinar las actitudes de los estudiantes del Ciclo de Iniciación Universitaria, CIU, de la Universidad Simón Bolívar, Venezuela, hacia la computadora, así como las diferencias entre las variables tecnológicas, género y dependencia de plantel en relación con ciertos factores relacionados al uso de las computadoras. A partir de una investigación de campo, no experimental, ex post facto, y con un diseño transaccional correlacional, tomando una muestra de 100 estudiantes del CIU.
Hinojo, Fernández y Arnaz (2002), realizaron un estudio cuyo objetivo fue investigar las actitudes que los docentes y futuros docentes poseen respecto a la formación en Tecnologías de la Información y la Comunicación aplicada a la educación. Para ello, los sujetos participantes fueron elegidos aleatoriamente de centros de enseñanza, tanto rurales como urbanos, de la Provincia de Granada, así como de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada. Sus actitudes hacia la formación en tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs) fueron evaluadas a través de una Escala Lickert de elaboración propia. Los resultados del estudio, de carácter descriptivo, dan a conocer, dentro de la formación y perfeccionamiento en TICs, las actitudes hacia las siguientes dimensiones: la aplicabilidad de las TICs en las diferentes áreas del currículum de Educación Primaria, la importancia de la formación en TICs aplicadas a la educación, el nivel y disponibilidad para la formación en TICs aplicadas a la educación, la formación inicial recibida en tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs) aplicadas a la educación y la Formación permanente en TICs aplicadas a la educación.
Morales y et al (2000), realizaron un estudio llevado a cabo por el Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa, ILCE, en ocho estados de México, aplicando a 877 profesores de secundaria una pequeña escala sobre actitudes de los docentes hacia la computadora y los medios para el aprendizaje.
Un primer aspecto fue en relación con las frecuencias de algunas variables importantes, encontrándose que un 33% de docentes tienen acceso a la computadora en su casa, mientras que sólo un 8% tiene acceso a la Internet. Por otro lado, el 67% de los docentes reportó haber tenido experiencia previa con la computadora. Un 39% reportó usar la computadora como apoyo en sus clases, aunque su uso parece ser ocasional. Estos datos contrastaron con los porcentajes de capacitación reportados, entre los cuales hay un 21% de profesores que no han sido capacitados, con un rango que va del 14% al 32% en los estados visitados. Por otro lado, los profesores que han sido capacitados en el uso de la computadora en el aula fue del 18%, pero este porcentaje se distribuyó en tres de los estados visitados: Nuevo León, Guanajuato y Tlaxcala. La mayoría de los profesores habían recibido solamente una capacitación sobre aspectos introductorios de la computadora.
En el análisis final del estudio, se reflexiona sobre la utilidad del instrumento de diagnóstico para la planeación de estrategias de formación y capacitación docente en el área de la tecnología informática.
Martínez et al (1998), realizaron un estudio que tuvo como objetivos principales: la determinación de las actitudes de los maestros en servicio para la incorporación de la computadora a la escuela, conocer sus opiniones con respecto a los diferentes roles que puede cumplir, analizar sus propuestas de disposición didáctica y determinar el grado de coherencia entre esos tres aspectos señalados. Para ello se trabajó con un conjunto de 92 maestros en servicio, una vez que ellos finalizaron un proceso de capacitación. Se trabajó con tres instrumentos: una encuesta de actitudes, una encuesta de opinión y un protocolo de análisis de propuestas didácticas. Los resultados fueron sometidos a análisis estadísticos y a interpretaciones cuantitativas y cualitativas. Las conclusiones incluyen un conjunto de recomendaciones tendientes a cubrir las equivocaciones detectadas.
Valenzuela (1998), realizó una investigación que permitió estudiar la influencia de las variables Estatus Socioeconómico e Internalidad sobre la actitud que puedan tener sujetos hacia los Estudios a Distancia. Para tal efecto se utilizaron 3 muestras, la primera estuvo conformada por 80 estudiantes de Educación Media de la cual se generaron dos grupos extremos en base a los puntajes obtenidos a partir de la aplicación de dos instrumentos: la escala para medir el Estatus Socioeconómico y la escala ACHEDI, que mide actitud hacia la Educación a Distancia. La segunda estuvo representada por 155 sujetos de la Universidad Nacional Abierta y un número equivalente del Instituto Universitario Experimental de Barquisimeto. De esta muestra se generaron también dos grupos extremos en base a los puntajes obtenidos a partir de la aplicación de dos instrumentos: Escala Levenson y Escala ACHEDI, que miden Internalidad y Actitud hacia la Educación a Distancia.
A partir de los resultados se pudo verificar que:
1.- Los estudiantes de Bajo Estatus Socioeconómico, en comparación con los de Alto Estatus Socioeconómico tienen una mejor Actitud hacia la Educación a Distancia.
2.- Los estudiantes de Alta Internalidad, en relación con los de Baja Internalidad, demostraron tener una actitud más favorable hacia la Educación a Distancia. Sin embargo, aun cuando las tendencias fueron en el sentido predicho no se pudo comprobar que:
1.- Los individuos que cursan estudios en la Universidad Nacional Abierta, UNA, Enseñanza a Distancia, fueron más internos que los individuos que cursan estudios en el instituto Universitario Experimental de Barquisimeto, Enseñanza Tradicional.
2.- Los estudiantes de la UNA, de Alta Internalidad aprueban en mayor proporción el curso Introductorio, que los alumnos de Baja Internalidad. Los resultados logrados han permitido conocer ciertas características de los alumnos de la UNA, pero al mismo tiempo recomendó repetir la investigación en aquellos aspectos donde no se alcanzó diferencias significativas para sustentar las hipótesis.
En consecuencia, estos estudios centrados en las actitudes docentes y que han tomado variables como la edad, el sexo, el nivel socioeconómico, el nivel profesional, el tipo de formación y otros, para establecer hasta qué punto estas variables, relacionadas con las características de los profesores, revelan que influyen en dichas actitudes.
Asimismo, los resultados de estos estudios confirman que a pesar de que ha habido pocos estudios relacionados con la actitud del uso de las TICs, en Venezuela, esta debe tomarse muy en cuenta, cuando se pretenda introducir programas innovadores.