complementarlas con nuevas actividades y recursos de aprendizaje; ponen a disposición de profesores y estudiantes opciones que extienden el texto convencional y el aula «cerrada» donde la única fuente de información es el docente (6).
Sin dudas, el carácter de la enseñanza del actual milenio ha estado matizado por el uso de los medios técnicos auxiliares, dentro de los cuales las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) han desempeñado una función preponderante por las ventajas que incorporan tanto para la explicación de los conceptos como para la apropiación, al desarrollar las capacidades de aprendizaje a partir del propio trabajo; lo que eleva la calidad de la asimilación de los contenidos. En la medida que ha ido progresando la tecnología, se ha incentivado la búsqueda de métodos que resulten efectivos y novedosos para el proceso docente educativo.
Dentro del vasto campo de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y su aplicación a la esfera educacional, el diseño de software educativo ocupa un lugar cimero y no constituye un trabajo exclusivo de ingenieros y programadores, se convierte en una tarea para el docente de la materia que sea, donde puede, a través de un trabajo cooperativo e interdisciplinario, dar solución a los problemas de aprendizaje que se presentan en el entorno donde se desenvuelve, e introducir innovaciones en su labor diaria educativa al crear nuevos ambientes de aprendizaje donde el alumno es el constructor de su propio conocimiento (7).
Esta situación no es ajena a la educación médica superior cubana. Cuba cuenta con un Sistema Nacional de Salud que ha logrado alcanzar indicadores del mismo nivel de países desarrollados. La educación médica cubana es un reflejo del desarrollo de su sistema de salud, y la incorporación y adecuación de las nuevas tendencias de la educación superior se convierten en un elemento de máxima prioridad (8).
En la universidad médica cubana se defiende «un curriculum integral y contextualizado con carácter de proyecto» (9). Sobre esta base, las transformaciones que se vienen realizando en ella durante los últimos años han privilegiado la creciente descentralización de muchas de las decisiones de la gestión educacional y, en el seno de estos procesos, resulta determinante la actividad científico-investigativa en los propios escenarios docentes que estimule al educador en el rol de profesor investigador (10).
Ese enfoque condiciona que el docente tenga que portar, además de la competencia académica inherente al dominio de la ciencia de la cual se nutre su disciplina o asignatura, la competencia didáctica para manejar las categorías tanto personales como no personales, la competencia organizativa que le permita gerenciar de forma adecuada el referido proceso, y la competencia tecnológica inherente al profesor universitario del siglo XXI unida al despliegue de su creatividad y experiencia en pos de la excelencia académica.
En la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, específicamente en la Facultad de Ciencias Médicas «Julio Trigo López», los profesores de la disciplina Filosofía y Sociedad pertenecientes al departamento de Marxismo Leninismo, sensibilizados con estos antecedentes, se insertan sistemáticamente en las actividades de superación profesional y autopreparación que garantizan la competencia tecnológica requerida para dar respuesta a su encargo social. Muchos materiales digitales de apoyo a la docencia de esta disciplina han sido confeccionados por sus docentes, que incluso se han destacado en la elaboración de supercursos para la cátedra de la Universidad Virtual de la Salud de la facultad, los cuales tributan a los contenidos de algunos temas declarados en los programas analíticos de las asignaturas Filosofía y Sociedad I y II que integran la disciplina mencionada anteriormente.
En estos programas se parte de la consideración de la situación actual de la impartición de las ciencias sociales y humanísticas en la enseñanza precedente, los mismos cumplen con los requisitos exigidos por el MES y las indicaciones del Comité Central del PCC sobre la enseñanza del Marxismo-Leninismo, con el objetivo de continuar consolidando la formación integral- humanista de nuestros egresados como profesionales, que ejercen también una imprescindible labor educativa en la comunidad (11).
Entre los objetivos generales de la disciplina se encuentra la participación consciente y el comprometimiento social de los estudiantes en el ejercicio de la profesión y en el perfeccionamiento de la sociedad socialista, a partir de la profundización de los conocimientos de la Filosofía Marxista-Leninista, desde su perspectiva cognoscitiva y metodológica, así como la capacidad, con el dominio de la teoría marxista-leninista de discernir, dentro de las corrientes ético filosóficas actuales, las que no se corresponden a nuestro proyecto social.
Cuando se examina el programa analítico de la asignatura Filosofía y Sociedad I (11), que cuenta con 58 horas/clase, hay que detenerse en el tema “La relación individuo-sociedad-cultura” que ocupa algo más de la quinta parte de ese fondo de tiempo y que resulta de importancia sustancial en la formación del profesional de la salud. Es el tema V cuyos contenidos se muestran seguidamente (11):
TEMA V. Individuo-sociedad y cultura.
5.1 El problema del hombre en la filosofía y en el Marxismo-Leninismo. El sentido de la vida.
5.2 La relación de lo biológico y lo social como problema filosófico y metodológico central de las Ciencias Médicas.
5.3 La relación individuo-sociedad, libertad y cultura. La identidad.
5.4 La concepción marxista-leninista de la enajenación. La enajenación en el mundo actual. Enajenación y salud.
Este tema se distingue por ser uno de los más importantes para Ciencias Médicas, tanto por su contenido teórico como por el papel metodológico que desempeña en la comprensión del hombre como una integridad concreta, que incluye aspectos biológicos, psicológicos y sociales; lo que constituye un principio rector para el abordaje de los fenómenos de la salud.
Estas razones, más el hecho de que es un tema controversial en la filosofía contemporánea, sobre el que existe una copiosa, diversa y dispersa bibliografía con la cual no cuentan los estudiantes de manera concentrada en su libro de texto, y que cuando se orientan actividades que implican búsqueda de información sobre el mismo, les resulta engorroso lograrlo y después estudiarlo y entenderlo aplicándolo a las condiciones que caracterizan la realidad contemporánea cubana, latinoamericana e internacional, adicionándolo al hecho de que en la revisión bibliográfica realizada no se encontraron reportes de medios de enseñanza hechos a la medida de tal intención