3) La promoción de la autonomía y la dignidad al enfermo son factores rectores en las decisiones terapéuticas. Los objetivos terapéuticos deberán elaborarse con el enfermo, él siempre marcará las pautas de lo que hay que hacer, lo que significa un vuelco considerable en los procederes de la Medicina contemporánea.
4) Concepción terapéutica activa y rehabilitatoria, superando el desconocimiento y la actitud negativa que se esconde tras el “no hay nada más qué hacer”.
5) Atmósfera (entorno) de respeto, confort, apoyo y comunicación adecuada, propiciando en todo momento seguridad y comodidad.
Los autores comparten estos criterios y asumen que la labor fundamental del enfermero es la de cuidar y que para desarrollar esta labor es fundamental el uso y aplicación del método científico que sustenta a la Enfermería como ciencia y a su vez otorga al cuidado paliativo características holísticas, si se comparan las bases de la atención paliativa con el Proceso de Atención de Enfermería:
a) Valoración inicial paciente-familia: Reconocer al cuidador primario, el entorno, los medios físicos y personales con los que se cuenta en cada ámbito y de los que dispone el propio servicio de Cuidados Paliativos, tanto hospitalario como domiciliario.
b) Detección de necesidades y problemas: Tanto generales como específicos, a fin de poder hacer un diagnóstico de Enfermería lo más completo posible, tanto del paciente como de la familia.
c) Planificación de los cuidados: Elaborar el plan de acción en coordinación con todo el equipo y la familia. La educación sanitaria, el apoyo emocional y las prioridades del paciente se convierten en acciones muy importantes. Se considera importante crear un clima de confianza para facilitar la actuación y que mejore la comunicación, de esta manera se facilita la elaboración de un buen plan de cuidados, donde se compartan las decisiones y los problemas con ellos.
d) Ejecución: Fijar las prioridades diarias de los cuidados es fundamental en la ejecución del plan. Las anotaciones o registros que hagamos sobre su marcha reforzarán los cuidados del enfermo y servirán al resto para encaminar los esfuerzos en la misma dirección.
e) Evaluación de los cuidados: De cómo se están realizando, del resultado que se está obteniendo y de la percepción de mejoría del propio paciente. También se hará una evaluación del estado general del enfermo, de la familia y de su entorno. Ha de ser continua, ya que se trata de un paciente plurisintomático y multicambiante.
Por otra parte y muy relacionado al planteamiento anterior, ha de tenerse una actitud crítica y abierta a otras posibilidades de cuidados, ya que lo que es válido para unos pacientes, puede no serlo para otros, por ello hay que individualizar los cuidados, cada vez que sea necesario, se adoptarán los cuidados al estado del paciente y situación global en la que se encuentra, siendo importantes las reuniones conjuntas con el médico para exponer toda la información de la situación y para la interpretación y valoración que se hagan de ella. La opinión de la enfermera en la toma de decisiones es muy importante por dos motivos en criterios de los autores:
- Ser conocedora del paciente y familia, dado por su mayor contacto en tiempo y la proximidad que estos sienten hacia Enfermería
- Ser ejecutadora de los cuidados y los tratamientos que se llevan a cabo, con cualidades manifiestas por: Vocación cuidadora, cierto altruismo, empatía y comprensión, capacidad de escucha y sinceridad (es preferible callar y escuchar antes de mentir).
Un aspecto que no debe ser olvidado y que contribuye a ejemplificar la relación Holismo-Enfermería-Cuidados Paliativos, es lo relacionado a los aspectos éticos en cuidados paliativos.
Es de destacar la preocupación de los profesionales de la salud por encontrar soluciones a los problemas éticos que se derivan de la práctica clínica diaria y que la bibliografía actual recoge y muestra como se ha intensificado cada vez más en las últimas décadas, tomando como punto de partida la importancia que tiene la toma de decisiones fundamentalmente en pacientes con enfermedades graves y en fase de terminalidad. En estos casos, con mayor frecuencia y complejidad se presentan serios dilemas de índole ética, muchos de ellos relacionados con la eutanasia, las decisiones en pacientes no capacitados y el encarnizamiento terapéutico. Algunos de estos dilemas suscitan fuertes debates, tanto en el ámbito profesional, como en el social y el religioso. (8)
La base para ejemplificar la relación del Holismo-Enfermería-Cuidados Paliativos, siguiendo el hilo conductor del pensamiento crítico relacionado a la ética y bioética, queda implícita en sus propias definiciones, por lo que se hace necesario precisar que el término ética y bioética no tienen el mismo significado, la ética se refiere a la disciplina que ataña a la moral y la bioética al estudio sistemático de la conducta humana, en el área de las ciencias de la vida y del cuidado de la salud en cuanto, a que dicha conducta es examinada a la luz de los valores y principios morales, donde los temas de la bioética están muy relacionados con la calidad de vida del ser humano en los planos social e individual y los presupuestos fundamentales son: (8)
– “Considerar a una persona concreta, en situaciones únicas. La ética no se da a través de sentencias o códigos. Los principios, válidos a priori, independientes de lugar y tiempo, son vacíos y superficiales, ya que no satisfacen las necesidades del ser humano. La ética no debe partir de ideas abstractas, sino de experiencias concretas y únicas.”
– “La deliberación ética es un problema de todos. El atender al enfermo supone deliberación prudente, interdisciplinaria e intercultural, considerando atributos de la naturaleza humana, como racionalidad, libertad y dignidad.”
– “Reexaminar continuamente los principios y su aplicación. Ciertos aspectos de la medicina se mantienen eternos; en cambio, su ejercicio siempre está cambiando, los valores médicos, jurídicos y sociales no son estáticos.”
Según Diego Gracia los principios éticos pueden agruparse en los siguientes niveles: (8)
Primer nivel:
No maleficencia.
Justicia
(ÉTICA DE MÍNIMOS).
Segundo nivel
Autonomía.
Beneficencia.
(ÉTICA DE MÁXIMOS)
Estos principios éticos sustentan en