DESCRIPCIÓN DEL CASO
Mujer de 71 años de edad, que acude al servicio de urgencias derivada del centro de salud por su médico de atención primaria por un cuadro de fiebre y tos de 6 días de evolución, la cual, refiere haber empeorado en las últimas 48 horas.
A las 24 horas del inicio del proceso, la paciente se personó en el Servicio de Urgencias del Hospital de Almería por tos. Durante la consulta, la paciente se encontraba hemodinámicamente estable, se le realizó una radiografía de tórax, siendo esta normal e instaurándose por parte del facultativo tratamiento sintomático, paracetamol 1 gr y ambroxol. Al sexto día de evolución, la paciente acude a la consulta de atención primaria por empeoramiento de la sintomatología, presentado disnea progresiva, hasta por mínimos esfuerzos, cefalea generalizada y tos productiva con expectoración purulenta.
A su llegada al hospital se realiza nueva entrevista clínica a la paciente.
- Anamnesis:
- Alergias: No alergias medicamentosas conocidas.
- Hábitos tóxicos: No consumo de alcohol ni tabaco.
- Antecedentes personales: hipertensión arterial e hipercolesterolemia. No intervenciones quirúrgicas.
- Tratamiento habitual: enalapril 10 mg en el desayuno y simvastatina 20 mg en la cena.
Durante la entrevista a la paciente, nos relata un episodio de tos profusa durante el almuerzo de hace seis días mientras se tomaba un plato de lentejas. Desde entonces comenzó a sentirse cada día peor, consultando dos veces con su MAP, y siendo ésta la segunda vez que acude al servicio de urgencias; a pesar de tomar la medicación como se la prescribieron, no ha notado ninguna mejoría, sintiéndose incluso peor en las últimas 48 horas, con falta de aire incluso cuando estaba sentada, sin dejar de toser y “arrojando flemas con pus”.
Exploración física:
- General: Paciente con regular estado general, normocoloreada e hidratada. Presenta ligera disnea de reposo con saturación de oxígeno del 87%.
- Cabeza y cuello: carótidas rítmicas, no se auscultan soplos. Orofaringe sin alteraciones. No se palpan adenopatías ni bocio. No ingurgitación venosa yugular.
- Auscultación cardíaca: rítmica, con taquicardia de 120 latidos por minuto. No se auscultan soplos.
- Auscultación pulmonar: reducción en la intensidad de los ruidos con la auscultación en el hemitórax izquierdo.
- Abdomen: ruidos hidroaéreos presentes normales, blando, depresible, no doloroso, no se palpan masas ni megalias, no defensa abdominal, no signos de irritación peritoneal. Murphy y Blumberg negativos. Puño- percusión renal bilateral negativa.
- Extremidades: pulsos distales presentes y simétricos, no signos inflamatorios, no edemas, no signos de trombosis venosa profunda.
- Constantes: Tensión arterial (TA): 140/90 mm/Hg; frecuencia cardiaca (FC): 120lx’; frecuencia respiratoria (FR): 30x’; temperatura (T): 38.9°C; saturación de oxígeno: 87%.
Ante la sospecha de neumonía secundaria a una broncoaspiración de cuerpo extraño, se decide su ingreso a cargo servicio de medicina interna.
- Pruebas diagnósticas: Tras la exploración inicial, se realiza venoclisis para extracción de tubos de laboratorio (bioquímica, hemograma, coagulación y gases venosos) y canalización de vía endovenosa periférica por la que se iniciará el tratamiento prescrito. Se procede a realizar una nueva radiografía de tórax. En ella se aprecia un infiltrado en el lóbulo superior del pulmón izquierdo.
Diagnóstico diferencial:
- Infiltrado neoplásico (linfangiosis carcinomatosa o linfoma maligno)
- Neumonía sobre lesión neoplásica subyacente
- Neumonía por aspiración de cuerpo extraño.
- Bronquiectasias
- Absceso pulmonar
- Sarcoidosis
- Fibrosis intersticial
Plan de actuación:
- Se inicia oxigenoterapia con mascarilla de alto flujo al 40%, con lo que se consiguió remontar saturaciones al 96%.
- La paciente se quedó en dieta absoluta, en la que no se permitió la ingesta de líquidos ni sólidos.
- Sueroterapia administrada por vía endovenosa periférica canalizada en el miembro superior derecho, con suero glucosalino, a una velocidad de 63 ml/h.
- Aerosolterapia: bromuro de ipratropio 0.25 mg/ml, budesonida 0.5 mg/ml y 3 centímetros cúbicos de suero fisiológico, cada 8 horas.
- Analgesia: paracetamol 1 gramo cada 8 horas si precisa.
- Corticoides: Metilprednisolona 40 mg intravenosa cada 8 horas
- Administración de tratamiento antibiótico intravenoso prescrito por el facultativo; Amoxicilina/Ácido Clavulánico 1 g/200 mg, e interconsulta con el servicio de neumología para su posterior programación, con el fin de realizar una fibrobroncoscopia, y de esta forma proceder a la extracción del cuerpo extraño, desbloqueando de esta manera la luz bronquial.
PRONÓSTICO Y COMPLICACIONES
Los enfermos con neumonía aguda no complicada, suelen presentar un periodo de recuperación de entre 14 y 21 días con el tratamiento adecuado. Sin embargo, pueden ocurrir complicaciones graves, sobre todo en pacientes ancianos; las más frecuentes son la parada respiratoria (o cardiorrespiratoria) y el empiema.
PREVENCIÓN
Según establece la OMS 1, la prevención es una de las maneras más eficaces para disminuir la morbi-mortalidad de esta enfermedad. Una vacunación eficaz, una adecuada alimentación y una correcta higiene, son los pilares para poder acelerar el control de la neumonía. Para ello, se estableció el Plan de Acción Mundial para la Prevención y Control de la Neumonía (GAPP), en el que se combinan diversas acciones de prevención, protección y tratamiento de la enfermedad, como son:
- Lavar las manos frecuentemente, en especial después de sonarse la nariz, ir al baño, cambiar pañales y antes de comer o preparar alimentos.
- No fumar, ya que el tabaco daña la capacidad del pulmón para detener la infección.
- Utilizar una máscara al limpiar áreas con mucho moho u hongos.
- Ciertas vacunas pueden ayudar a prevenir la neumonía en los niños, los ancianos y personas con diabetes, asma, enfisema, VIH, cáncer u otras condiciones crónicas: Vacuna antineumocócica (Pneumovax, Prevnar) previene el Streptococcus pneumoniae.
- Vacuna antigripal que previene la neumonía y otras infecciones causadas por los virus de la influenza. Se debe administrar anualmente para proteger a la persona contra nuevas cepas virales. Vacuna Hib que previene la neumonía en niños a causa del Haemophilus influenzae tipo b.
- Respirar profundamente puede ayudar a prevenir la neumonía si la persona está hospitalizada, por ejemplo, mientras se recupera de una cirugía. A menudo, se suministra un dispositivo de respiración para ayudar en la respiración profunda.
DISCUSIÓN
La neumonía, suele ser un diagnóstico que se emite basado en el cuadro clínico que la acompaña, junto con la demostración de la existencia de un infiltrado pulmonar, mediante la realización de alguna técnica de imagen.
En el caso de nuestra paciente, y ante la sospecha de una neumonía por broncoaspiración de cuerpo extraño, se decidió su derivación al hospital de referencia, para que mediante una valoración por fibrobroncoscopia, se procediera a la extracción del cuerpo extraño.
En el adulto, es poco frecuente la obstrucción bronquial por cuerpo extraño 7, pero si es cierto, que su incidencia se incrementa con la edad y la presencia de diversas enfermedades neuromusculares, siendo por ejemplo la neumonía por aspiración la causa más frecuente de mortalidad durante el primer año en aquellos pacientes que han sufrido un ictus 8.. En la mayoría de las ocasiones, en las que se produce una broncoaspiración de un cuerpo extraño, es provocada por alimentos, siendo los huesos pequeños, los más frecuentes, siendo visibles en la radiografía de tórax, por lo que nos facilita el diagnóstico.
Debemos tener en cuenta que la cumplimentación de la historia clínica realizada de forma correcta, es la mejor forma de aproximación diagnóstica, pero a pesar de ello, el diagnóstico se puede retrasar en algunas ocasiones.
La evolución de una neumonía por aspiración de un cuerpo extraño sin la aspiración del mismo, suele tener una evolución tórpida, con reincidencia en cuadros de infección respiratoria, a pesar de estar sometido a tratamiento antibiótico.
La broncoscopia, se considera el método diagnóstico y terapéutico de elección 7,9 ante la sospecha de que exista una obstrucción bronquial y, dentro de ésta, la fibrobroncoscopia.
Una vez realizada la fibrobroncoscopia y la extracción del cuerpo extraño, se debe proceder a la realización de unas nuevas radiografías seriadas de tórax, a partir del décimo día desde el inicio del tratamiento antibiótico 11.
CONCLUSIÓN
Desde los Servicios de Atención Primaria hasta la atención especializada durante el ingreso hospitalario, es primordial la recogida de una correcta y completa anamnesis del paciente, ya que ésta nos aportará información de gran utilidad para poder orientar el diagnóstico definitivo hacia una neumonía por cuerpo extraño, ya que su evolución sin un adecuado tratamiento será muy tórpida.
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