desesperación y culpa y pena a un entendimiento de los desafíos que su miembro de familia afronta y el coraje ellos tienen que tratar con la enfermedad. La aceptación reconoce que nadie es culpable y que usted puede seguir adelante. Es en este punto que puede abogar y usar su entendimiento para unirse a otros en apoyar las actividades de abogacía. (1.1)
Entre 70 y el 90 por ciento de individuos tienen una reducción significativa de síntomas y una mejor calidad de vida con una combinación de medicación y tratamiento psicosocial y apoyos, la psiquiatría es la ciencia que estudia las enfermedades mentales desde un punto de vista del comportamiento, emocional y psíquico del ser humano. (1.2)
Desde hace muchos años se ha venido tomando en cuenta la participación de los familiares en cuanto a la compenetración con los pacientes psiquiátricos, que le ayude al núcleo familiar a superar todas las adversidades que se llegan a plantear a consecuencia de estas alteraciones.
Si bien hay muchas familias que han asumido estas patologías no como una amenaza o vergüenza hacia ellos, hay familias que aun no entienden todas las causas y consecuencias que estas acarrean posterior a las primeras crisis.
En este trabajo se habla sobre las formas de cómo las familias pueden manejar a un pariente con alteraciones mentales y cuán importante es el apoyo en ellos, dándole mejoras a su condición, impulsándolos a salir o a progresar con más facilidad de estos estados, desde un punto de vista terapéutico.
DESCRIPCIÓN DE LA SITUACIÓN
Para el paciente con problema de salud mental, mantener el vínculo familiar, es un factor importante en el proceso del tratamiento y de la recuperación-rehabilitación. La familia puede contribuir al apego terapéutico, elemento indispensable para evitar una recaída o una agudización del cuadro clínico.
La familia es fundamental para el cuidado de pacientes con trastornos mentales, ya que ellos serán un soporte especial para cada uno de estos.
Cuando un miembro de la familia se enferma con trastornos mentales, la vida normal y la convivencia familiar y social se verán alteradas o afectadas. Es de vital importancia que todo el núcleo familiar maneje y conozca sobre la enfermedad para así lograr llevar a cabo un ambiente armónico en el hogar.
Al principio, en el impacto familiar suele ser frecuente el fenómeno de no dar crédito a lo que pasa. Se inicia una serie de consultas para confirmar el diagnostico y finalmente cuando se acepta, se genera un sentimiento colectivo de miedo, vergüenza y culpabilidad basado en falsas percepciones del problema que se derivan de una información insuficiente. (1)
Por la falta de manejo de conocimiento de la enfermedad, el sentimiento predominante es la angustia, que se pone de manifiesto con críticas o recriminaciones mutuas entre los miembros de familia, apartándolos así de reuniones sociales viéndose cada vez más el deterioro de la vida normal.
Lo más importante desde el punto de vista de la familia, es en primer lugar reconocer los síntomas de la enfermedad al comienzo y posteriormente en las crisis, y saber cómo actuar en tales casos. (1)
Una de las formas más fáciles para la familia de reconocer estas patologías, es que el miembro afectado, empieza a cambiar sus hábitos cotidianos, deja de asistir a reuniones sociales, se vuelve más aislado, no participa en conversaciones, se observa inquieto, baja la calidad de estudio o trabajo, en general, se observa un cambio desde adentro de la personalidad del individuo.
Existen situaciones que pueden aparecer al comienzo de una esquizofrenia como lo son el consumo de drogas; crisis en la adolescencia intensas o situaciones graves de estrés, por lo que se impone necesariamente consultar con el médico de cabecera, quien derivara el caso a los especialistas en psiquiatría para delimitar el cuadro.
A veces, junto a los síntomas extraños aparecen otros más llamativo y más graves aun, por ejemplo encontrar al familiar hablando solo, o con la televisión, o no querer comer aduciendo que la comida sabe extraña, o quedarse de repente bloqueado como si estuviera oyendo algo que nosotros no oímos, o empezar a descuidar el aseo personal y las normas de educación que desde siempre existieron. (1)
Para las familias afectadas, es importante asumir las enfermedades mentales ante lo imprescindible que estas puedan llegar a ser. Es importante que acepten el reto de cuidadores ya que estas patologías afectan tanto a la conducta del ser humano.
Es necesario entender que no hay que sentirse avergonzados porque algún miembro de la familia presente estas patologías, ya que nadie tiene la culpa; lo que hay que lograr es que la familia permanezca unida y que esta condición no cambie el estilo de vida, saber hablar con naturalidad y responsabilidad de lo que son los trastornos mentales, llevará a un mejor manejo de estas, aclarando falsas creencias y mitos de la misma.
Los consejos más importantes para la familia en la fase de aceptación son:
- Tener la máxima información posible de la enfermedad y no quedarse con ninguna duda.
- Sintonizar con el médico lo más posible, es decir, colaborará que entre paciente y familia exista un ambiente cordial.
- Seguir las prescripciones médicas estrictamente e informar de aquellas modificaciones que resulten sospechosas de que algo va mal.
- Hablar con naturalidad de la enfermedad y los problemas que se plantean; el silencio es muy culpabilizador.
- Evitar el aislamiento, la soledad solo aumenta la angustia y no conduce a nada positivo.
- Fijarse objetivos modestos y realistas con el paciente.
- Evitar el enfrentamiento directo con el paciente, si es preciso recurrir a terceras personas.
- Nunca eludir el dialogo con el paciente sobre aquello que le preocupa, manifestándole en todo momento con veracidad que es lo que padece aunque no lo entienda o no lo acepte. (1)
El trabajo con las familias es esencial, sobre todo en los casos en los que las enfermedades no son conocidas por el grupo familiar. Considerando la importancia del papel de la familia en la recuperación de los pacientes, el trabajo desarrollado junto a ella enmarca de forma positiva la condición general del paciente. (2)
Es importante tener en cuenta todos los factores psicosociales y ambientales debido al contexto de violencia, inseguridad social e inestabilidad laboral y económica. (3)
Los pacientes con enfermedades mentales requieren de una adaptación de