Colonizan la piel y se multiplican en ella.
• Residente Temporal:
– Contamina la piel desde el exterior, colonizándola en ocasiones durante temporadas. Tiene gran trascendencia no solo por ser capaz de producir lesiones en el individuo, sino por su característica de convertirlo en portador sano.
• Transeúnte:
– Está presente en la piel, sólo circunstancialmente y por contaminación exterior pero no la coloniza, es decir, no llega a multiplicarse en ella.
Desarrollo de la infección:
• Factores del germen:
– Virulencia del microorganismo
– Tamaño del inóculo
– Resistencia a los antimicrobianos
• Factores del huésped:
– Integridad de la piel y mantenimiento del manto cutáneo ácido
– Inmunidad natural total o relativa
– Inmunodeficiencia esencial
– Inmunodeficiencia adquirida o por tratamientos que interfieren los mecanismos inmunitarios
– Distribución de la flora cutánea
Las Infecciones Primarias se inician sobre un tegumento previamente normal.
Las Infecciones Secundarias inciden sobre una lesión cutánea preexistente.
El proceder más correcto es la tinción Gram de la supuración pues el diagnóstico de la infección se apoya en los hallazgos de muchos polimorfonucleares y un único tipo de bacteria predominante.
Importancia de la INMOVILIZACIÓN en las Infecciones:
La inmovilización constituye un método esencial de lucha contra la infección y del cual nunca será exagerado hacer constar la importancia.
Las defensas de los tejidos son más eficaces si el miembro es inmovilizado. Toda movilización prematura provoca un nuevo acceso vasomotriz, rompe las barreras de defensa y disemina los gérmenes.
Esta inmovilización se realiza más fácilmente y con mayor perfección con la ayuda de un vendaje enyesado.
No es preciso insistir mucho para demostrar que el enyesado a nivel de los miembros deberá inmovilizar las articulaciones supra y subyacentes del foco, en posición de función, y constantemente habrá que vigilar que las articulaciones no enyesadas, particularmente las de los dedos de las manos y de los pies, sean activamente movilizadas.
La inmovilización enyesada en el tratamiento de la inflamación aguda de las partes blandas de los miembros, permite el reposo absoluto de los tejidos inflamados y previene la actividad de los focos sépticos debida a los incesantes cambios de volumen de los músculos.
Es evidente que estos enyesados, para ser soportables, han de ser muy ligeros, delgados, con ventanas y fáciles de abrir en caso de alarma.
La inmovilización enyesada, que tiende a realizar en el miembro inflamado un estado de vida menos activo, combate eficazmente la hiperactividad de origen flogótico y permite disminuir el número de curas.
La inmovilización en este caso, ha de ser rigurosa y las curas escasas.
NUESTRA POSTURA en este apartado de la Infección es el siguiente:
Como decíamos al empezar y con sorpresa para muchos, una herida la podemos considerar «siempre» infectada si no hacemos nada, y «nunca» si nos atenemos a unas normas básicas.
Solo las grandes quemaduras son propensas a la progresión rápida de colonización bacteriana, a celulitis y septicemia.
En primer lugar debemos evitar la presencia de «costra» (capa amarilla viscosa de fibrina, pus y tejido necrótico presente en las úlceras, quemaduras y toda herida que cicatriza por segunda intención), pues retrasa la cicatrización y predispone en gran medida a que la herida se infecte.
Debemos pues hacer un buen desbridamiento quirúrgico retirando la escara, detritus, tejidos necróticos, esfacelos y ocluir la herida en un ambiente húmedo para evitar que se forme la misma.
No hay que olvidar dentro de este apartado las MIASIS, que es la parasitación por larvas de dípteros en las heridas no ocluidas cuya incidencia está aumentando considerablemente.
Antes de la oclusión, después del desbridamiento y en cada cura hasta su cicatrización mantendremos la herida cinco minutos con gasas empapadas en suero fisiológico hipertónico templado (+/- 40º C)
El motivo de estar caliente el suero se debe a que cualquier herida si es irrigada con suero frío tarda tres o cuatro horas en alcanzar nuevamente su temperatura y esto lo podemos evitar fácilmente introduciendo el suero en un baño o bien utilizando un microondas.
Respecto a la acción antiséptica del suero fisiológico hipertónico no hemos podido demostrarla «in vitro» en cultivos realizados con gérmenes marcadores epidemiológicos (Escherichia coli, Staphilococcus aureus y Pseudomonas aeruginosa). El buen resultado «in vivo» de dicha técnica, debe ser debido a la escasa cantidad de gérmenes existentes en las heridas bien tratadas, así como a la presencia en los pacientes de los distintos modos de resistencia a la infección.
Solo aplicaremos en caso de un desbridamiento incompleto, en contadas ocasiones y siempre al principio del tratamiento un antibiótico local en solución.
DIFERENCIAS ENTRE CICATRIZACIÓN
POR 1ª o 2ª INTENCIÓN
1ª intención: Directa.
2ª intención: Granulación.
Estas dos formas de cicatrización ponen en marcha los mismos mecanismos biológicos, diferenciándose en que en la primera intención hay una remodelación «a posteriori» de la cicatriz que se genera y en la segunda intención se produce una contracción de los bordes de la úlcera que ayuda al cierre precoz.
En realidad pueden definirse tres tipos de cierre:
– Cierre Primario: Se consigue mediante